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Nora Hildebrandt fue la primera mujer que tatuó su cuerpo completamente en tiempos en que el tattoo era sólo cosa de hombres rudos y soldados de la guerra civil. Influenciada por su padre,el Alemán Martin Hildebrandt, primer tatuador profesional de américa, entregó su cuerpo como lienzo, de pies a cabeza, para que plasmaran en él cientos de formas y colores sin igual, y así poder exibirlo públicamente pese al conservadurismo de aquellos años. ya en 1840 Nora tenía en su cuerpo una llamativa composición de dibujos y tipografías, lo que la hizo merecedora de un puesto en el circo local y el rechazo absoluto del sexo opuesto.
no se tienen mas datos luego de 1840, se cree que escribió una autobiografia con miles de fotografias, pero no se tiene mas informacion.

Esto va dedicado a una persona que nunca lo leerá

REMORDIMIENTO PÓSTUMO

Cuando duermas por siempre, mi amada Tenebrosa,
tendida bajo el mármol de negro monumento
y por tibia morada y por solo aposento
tengas, no más, el antro húmedo de la fosa;

Cuando oprima la piedra tu carne temblorosa,
y le robe a tus flancos su dulce rendimiento,
acallará por siempre tu corazón violento,
detendrá para siempre tu andanza vagarosa.

La tumba, confidente de mi anhelo infinito
(compasivo refugio del poeta maldito)
a tu insomnio sin alba dirá con gritos vanos:

"Cortesana imperfecta -¿de qué puede valerte
denegarle a la Vida lo que hoy llora la muerte"?
Mientras -¡pesar tardío!- te roen los gusanos.

El regreso de Bruce

Qué alivio reencontrarme con Bruce, una breve y significativa liberación de mi memoria, su recuerdo pareciose estar, por mucho tiempo, bajo toneladas de escombros, estúpidos y nefastos recuerdos.
Bruce Chatwin, de seguro ya sabrán de él, un analítico de arte y arquitectura que, aún gozando de mucho prestigio y dinero, renunció a las comodidades que inglaterra le brindaba, y se dedicó a viajar por el áfrica, intentando reencontrarse con los orígenes de la cultura, y quizá poder disfrutar de la sencillez de lo auténtico. Un novelista inspirador...Muy inspirador, al menos lo es para mi.
Casi terapéutico...qué bueno fue reencontrarme con él..más bien, reencontrame conmigo misma, y recordar aquellas motivaciones trascendentales que solían guiar mis acciones, es bueno darse cuenta que podemos dejar de ser entes inanimados y retomar el camino que dejamos inconcluso y perdido en el tiempo. Bruce representa, en cierta medida, la voluntad, la determinación, y la inspiración que pretendo alcanzar, alguna vez, en mi vida. inspirador, por un lado, y educativo, por el otro, sus libros son registros de una voluntad nutrida de un conocimiento y una valoración de lo auténtico del ser humano, entre otros.

Saludos para los que pasan por aquí de vez en cuando

chao pescao